La geopolitica del petróleo

El comportamiento económico y político tiene a menudo impactos en las actitudes colectivas de las sociedades en las diferentes latitudes del mundo. La más reciente lo constituyó el movimiento anti-sistémico originado en Madrid y que luego se extendió por diferentes países especialmente de Europa, Norte América y Latinoamérica cuyas protestas se basaron en un eje común: el fin del poder neoliberal y de la banca mundial.
El petróleo continuará siendo el principal interés geoestratégico de los EEUU, tal y como quedó demostrado en los últimos sucesos ocurridos en Medio Oriente. Efectivamente, una serie de manifestaciones en Egipto destronó al presidente Mubarak después de más de cuarenta años en el poder al servicio de Norteamérica y le costo la vida al presidente Kadafi, muy a pesar que el ingreso medio de el país libio gozaba de uno de los mejores estándares de vida en África de hecho, en clara ventaja sobre Arabia Saudita, el país con las mayores reservas mundiales, hasta hace unos pocos años.
Las amenazas sobre el país Iraní, basadas en la supuesta fabricación de armas nucleares, tiene de fondo un interés petrolero. El informe presentado por la Agencia Internacional de Energía demuestra la falsedad de tal insinuación. En respuesta, Irán realizó a finales de diciembre de 2011, maniobras militares con misiles con una efectividad del cien por ciento, que en caso de una guerra estaría basada en una confrontación nuclear. Ipso facto, estaría cerrando el estrecho por el que transita un tercio de embarcaciones de hidrocarburos del mundo, (El Universal, Caracas, 2012).
De acuerdo a las estimaciones del Departamento de Energía de los EEU se prevé un aumento de la demanda mundial entre 1993 y 2015, mayor al 50% y por supuesto, el mayor incremento del consumo se concentrará en el Extremo Oriente. En virtud de lo cual, Eurasia, que representa el 75% de la población mundial, concentra la mayor parte de la riqueza física mundial, el 60% de la población del planeta y las tres cuartas partes de las reservas energéticas mundiales conocidas, constituye la zona geopolítica mas importante para la sobrevivencia del mundo occidental.(Los señores de las sombras, Estulin, 2007)
Rusia como parte importante en este ajedrez geopolítico y parte de Eurasia, aun cuenta con el poder nuclear y los recursos petroleros y metales preciosos, como el oro. Las recientes protestas en contra de Putin en las pasadas elecciones, indican esta ofensiva norteamericana en el plano de la política domestica que amenaza con manipular a grupos desestabilizadores para causar caos con fines exclusivamente geopolíticos.
Latinoamérica, convertido por años en el patio trasero norteamericano, emerge como polo geoestratégico especialmente por sus recursos energéticos (petróleo y gas) y sus recursos naturales (agua y bosques), que se reconfigura en un modelo basado en la soberanía política, energética, mas integrada y con la creación de una moneda regional el Sucre, un fondo monetario latinoamericano y corazas de frente a las amenazas depresivas de la economía neoliberal, que en conjunto amenaza el poder de influencia de los EEUU. El exceso de la confianza norteamericana en su traspatio condenó su poder de influencia, especialmente por un polo poderoso, el de Caracas, por ahora con las reservas más grandes de petróleo pesado en la franja de Orinoco y que abastece el consumo excesivo de Norteamérica, que según las estimaciones del Departamento de Energía norteamericano lo coloca como el más dependiente del mundo, en virtud de que tres de cada cuatro barriles se importan.
Finalmente nuestra economía y política domestica, enfrentada al impacto de la próxima recesión, causada por mecanismos artificiales, están supeditadas a las actividades financieras mundiales frágiles y de consecuencias imprevisibles, a menos de que se diseñen medidas de contingencia para neutralizar el impacto. Una apertura extensa a los mercados extranjeros debe ser acompañada de mecanismos de protección frente a la inflación importada y la debilitación de la industria nacional.